Dicen que los monstruos no existen,
otros dicen que están por todas partes, yo era de las que creía que solo existían en las películas de miedo .Me
llamo elle tengo 18 años y vivo en Madrid con mi madre pero por poco tiempo, porque
me voy a mudar a Londres. Mis últimos días los iba a pasar con mis amigas el día
de Halloween, tenia todo preparado: ropa, maquillaje, zapatos y lo mejor, la
fiesta iba a ser la mejor de todos los tiempos
pero no llegue a comprobarlo…
Era 31 de octubre de 2013 estaba
ilusionada por la fiesta, me puse mi vestido rojo con el corsé y unos tacones
negros, me alise el pelo y me puse
mechas rojas y para dejar a todos alucinados me puse unas lentillas de color amarillo
y unos colmillos de mentira , parecían tan reales que asta daba miedo. Cuando
ya estuve lista, Salí de casa sin despedirme de mi madre la deje una nota ,
ponía : mama me quedo a dormir en casa de Elena no me esperes un beso. Cuando iba por la calle de Peñalver me senté
un rato en un banco y al instante oí un ruido – ¿Hola?- pregunte mientras me
levantaba lentamente, pero nadie contesto pero le seguía oyendo - ¿Quien eres?-
recuerdo que mientras preguntaba hacia
tanto frió que mi voz se congelaba al hablar
también notaba su aliento frió por mi cuello y una mano subía por mi
pierna su tacto era frío pero ala vez delicado , paralizada sin saber
que hacer cerré los ojos . Cuando los
abrí me encontré su rostro a menos de 3 centímetros de la mía , intente gritar
pero el miedo y el frió me impedía pedir
ayuda .. sus ojos verdes llenos de ira
reflejaban mi cara de miedo y su boca estaba manchada de sangre. Sus
colmillos eran afilados y su rostro era
tan blanco como la nieve , cogí aire y tartamudeando le pregunte..¿Qui-qui-quien
eres? Oye estas bromas no me gustan , déjame ir .
Él no contestaba solo me miraba
sin pestañear se acercó lentamente a mi oído y me susurro una sola palabra :
corre. Salí corriendo sin mirar atrás , me escondí en un callejón e intente
calmarme pero era imposible , su voz me perseguía , respire hondo y me dije a
mi misma – esto no es real , esto no es real . a lo lejos oí pasos que se
acercaban a mi y una voz que no paraba de decir : elle , ¿ donde estas ? , no
puedes esconderte de mi .Me tape los oídos intentando dejar de oírle y
sigilosamente me escondí detrás de unos cartones , quería pedir ayuda pero ¿ a
quien ? , cogí mi móvil pero no tenia casi batería , mande un mensaje a Elena
diciéndola que necesitaba ayuda y rece porque viniera. No sabia el tiempo que permanecí escondida pero
a mi me pareció una eternidad .Nadie vino,
el frió me estaba congelando el cuerpo y cuando pensé que todo había sido un sueño me levante casi sin fuerzas y Salí del callejón , empecé a correr
y pidiendo ayuda por la calle , pero ya
no había nadie . el viento movía los arboles de un lado a otro y la calle
estaba desierta – elle – otra vez estaba
su voz ahí , me di la vuelta rápidamente pero no había nadie – elle – cuando mire al frente apareció de repente ¡
Ah ¡ ¿ quien eres ? ¿Que eres ? – no sabia que hacer – tranquila , que haces a
estas horas sola por la calle – mientras que me hablaba su mirada de deseo se
hacia mas grande y mas y mas , me sonreía pero no entienda porque , lentamente
bajo su boca hacia mi cuello y cuando pensé que era el fin de mi vida, oí una
voz que gritaba mi nombre - ¡ elle , elle ¡ ¿tía donde estas?- era Elena ,
corrí hacia ella llorando - ¿ se puede
saber donde te has metido ? – El. Su voz…me miraba… - estaba paralizada no
sabia lo que decía..- oye elle ¿ de quien hablas ? , aquí no hay nadie solo
estamos tu y yo.-
No.. no puede ser él estaba ahí
enfrente mía.. – escucha aquí no hay nadie, creo que ahora mismo estas confusa
mejor vamos a casa , necesitas descansar
.
Mientras que iba camino a casa
con Elena, yo seguía notando que había alguien mas ahí pero intente pensar que
había sido solo producto de mi miedo .Llegue a casa y me metí en la cama
directamente, no tenia ganas de
nada, cuando estaba ya en la cama oí una
voz que dijo : nos volveremos a encontrar muy pronto y su aliento volvió a
rozar mi cuello … Al día siguiente se lo conté a Elena a mi madre y algún amigo
mio , pero nadie me creyó.
No llegue a saber su nombre pero os digo una
cosa nunca, se me olvidara sus ojos y
sus colmillos sedientos de sangre. Ahora sé que los monstruos viven entre
nosotros por eso , ten cuidado .